A la Bodega Catena Zapata nadie le puede negar que es una de las que marca el rumbo en Argentina.
Y tampoco, para ningún porteño es posible olvidar el Restaurant El Tropezón, al menos para aquellos que tenemos algunos años vividos.
Por partida doble tuvimos la nostalgia de cosas pasadas, porque se presentó el D. V. Catena Clarete de Malbec 2015 en este Restaurant, que desde 1896 fue lugar de reunión de personalidades de la música y el arte porteño. Estuvo cerrado durante décadas (desde 1984) hasta que su actual propietaria decidió reinstalar uno de los más tradicionales de Buenos Aires.
Si nos remontamos a la historia argentina, el Clarete era uno de los vinos que se consumía en los bodegones del antiguo Buenos Aires. Vino con raigambre inmigrante, de españoles (Clarete) y franceses (Claret), durante muchos años compartió las comidas en nuestras casas.
Cuando la revonversión se instala en la Industria, su estela se fue apagando hasta desaparecer del mercado.
Hoy reaparece con la fuerza de un vino de muy buena calidad. La bodega quiere homenajear al Malbec elaborado en Burdeos (Francia) desde el Siglo XII y famoso en la sociedad londinense hasta el Siglo XVIII.
Sus uvas provienen de El Cepillo, Tupungato (Mendoza), pleno Valle de Uco, fermentó y tuvo crianza durante 8 meses en barricas de roble francés usado.
Es un vino fresco con un gran caudal de fruta. Su ingreso dulce y taninos sedosos lo hacen gratificante. Con muy buen final.
Alc. 13,8°
Precio $ 530